Es posible que la llegada de los nanobots ayuden a cumplir a muchos su sueño de trabajar desde casa vendiendo combustible y no me refiero a la venta de gas doméstico para taxistas o a envasar diesel para contrabando. Un grupo de científicos ha publicado un reporte preliminar donde indican que el esperma sería un excelente combustible para las futuras hordas de nanobots que escanearán y amplificarán el interior del cuerpo humano con fines médicos.
Los expertos en nanotecnología afirman que, para evitar el rechazo del sistema inmunológico, los nanobots deben ser construídos con componentes biomédicos, y que la biología reproductiva puede ofrecer una solución al problema de energizarlos. Para solucionar el problema de la energía, los investigadores utilizarían la cola (o flagellum), que impulsa el esperma humano a una velocidad de 7 pulgadas por hora, y que contiene mitocrondias, productoras del adenosín trifosfato (ATP), un compuesto de alta energía.
Debido a su naturaleza, es poco probable que los nanobots se queden escasos de combustible y muchos tendrán la posibilidad de colaborar con la ciencia, con o sin ayuda profesional.