Instagram está probando nuevas funcionalidades que tratan de replicar o mejorar características de otros productos de la competencia. Hace poco presentó el envío de vídeos cortos, un servicio parecido al que otros productos como Vine vienen ofreciendo.
La última característica ofrecida es el envío de imágenes directamente al inbox de otros usuarios, conocida como Instagram Direct, que trata de satisfacer la creciente necesidad de privacidad de los usuarios. Esa necesidad se ha marcado más recientemente debido a los escándalos de espionaje de los que se acusa a una agencia del gobierno de Estados Unidos, la NSA.
A esto se une la necesidad de usuarios, especialmente de los más jóvenes, que desean controlar específicamente quienes pueden ver sus mensajes y ven como nuevos productos como Snapchat resultan más atractivos que las redes sociales más abiertas como Facebook.
Instagram Direct permite enviar imágenes a una lista específica de usuarios pero adicionalmente le da la oportunidad al remitente de eliminar totalmente esa imagen de la red lo que incluye las copias almacenadas en los equipos de los usuarios destinatarios.
Incluso si la eliminación se da mientras un usuario está viendo la imagen el programa la borrará y mostrará un mensaje que dice «esta imagen ha sido eliminada».
Los servicios de Internet se adaptan a las mayor necesidad de privacidad de los usuarios con la presencia de nuevos productos como Snapchat o Hash o de adaptaciones de los grandes que se dan cuenta que pueden perder muchos usuarios. Sin embargo hay maneras, poco sofisticadas, de evadir estas seguridades como capturas de pantallas y tomar fotografías de la pantalla con otro equipo.
Visto en Arstecnica.