En el mundo de la inteligencia artificial, hay figuras muy reconocidas como Elon Musk y OpenAI. Recientemente, las tensiones entre ambas partes han escalado, culminando en una demanda. La respuesta de OpenAI a esta situación ha sido un rechazo a las acusaciones de Musk.
El origen del conflicto
A primera vista, podría parecer sorprendente que Elon Musk, uno de los cofundadores iniciales de OpenAI, haya terminado en una batalla legal con la organización. Sin embargo, según se desprende de los comunicados y correos electrónicos publicados por ambas partes, el desacuerdo radica en la dirección y control sobre los desarrollos en IA. En un momento dado, según OpenAI, Musk deseaba «control absoluto» sobre la compañía mediante su fusión con Tesla o queriendo ser el CEO con control mayoritario.
La postura firme de OpenAI
OpenAI ha manifestado claramente que no podían acceder a términos que otorgaran semejante nivel de control a una sola persona ya que iba en contra de su misión original como organización sin fines de lucro. Esta disputa se intensificó cuando Musk presentó una demanda alegando que OpenAI había abandonado su misión sin fines lucrativos para convertirse en una subsidiaria «de facto» cerrada al código fuente bajo Microsoft.
Musk también ha hecho afirmaciones controvertidas sobre GPT-4 en su demanda, describiéndolo como «un algoritmo propietario de facto de Microsoft» que representa inteligencia general artificial (AGI). Aunque estas afirmaciones fueron rechazadas previamente por OpenAI en un memorando interno para el personal, no se abordaron directamente en su publicación oficial del blog.
Clarificación sobre el término «open»
Frente a las críticas y la demanda interpuesta por Musk, OpenAI ha tomado medidas para clarificar lo que significa «open» en su nombre. Según correos compartidos por la compañía datados desde 2016, parece evidenciarse que inicialmente hubo acuerdo entre las partes sobre ser menos abiertos conforme se acercaban a construir AI significativa. El concepto era que todos deberían beneficiarse del resultado final pero no necesariamente compartir todo el proceso científico.
Hoy día, OpenAI defiende su decisión afirmando estar haciendo accesible su tecnología ampliamente para empoderar personas y mejorar vidas diarias. Esto incluye contribuciones open-source y proporcionar acceso amplio a lo más poderoso en IA hoy día; incluso ofrecen una versión gratuita usada por cientos de millones cada día.
¿Un divorcio amargo?
A medida que se revelan más detalles del conflicto legal entre Elon Musk y OpenAI mediante comunicados públicos y correos electrónicos redactados parcialmente divulgados por ambas partes; algunos observadores han comenzado a describir este enfrentamiento no solo como un simple desacuerdo comercial sino como algo parecido a un divorcio amargo lleno de resentimientos personales.
Sin duda alguna, esta controversia pone bajo los reflectores importantes preguntas éticas y estratégicas sobre cómo debe avanzar el desarrollo e implementación globalmente beneficioso e inclusivo de tecnologías potencialmente transformadoras como AGI.