En los centros de entretenimiento actuales es muy común observar detrás del mueble una maraña de cables donde no se sabe qué-se-conecta-con-qué. Un chip desarrollado en Australia podría exterminar en un lapso de un año o dos, esos últimos rezagos analógicos.
El GiFi es un chip de silicio que mide 5 milímetros por lado y que transmite datos inalámbricas a una velocidad de 5 gigabytes por segundo, hasta una distancia de 10 metros. Un reproductor de DVD o un dispositivo digital de almacenamiento equipado con este chip, podría transmitir sin interrupciones una película de alta definición a un televisor cercano. Lo mismo funcionaría en los equipos de audio y sistemas de amplificación.
En el campo de la telefonía móvil podría convertirse en el nuevo estándar para la transmisión de datos entre equipos, reemplazando al bluetooth y a los infrarrojos.
El chip sólo usa una pequeña antena de un milímetro, menos de 2 vatios de poder y cuesta menos de US$10 por unidad, características que lo hacen muy adoptable para cualquier fabricante que quiera incluírlo en sus próximos productos.